Hoy quiero comenzar haciéndote una pregunta: ¿En qué quieres convertir tu marca?
Puede que lo sepas, puede que no tengas muy claro hacia dónde quieres ir pero sin duda alguna quieres seguir adelante y por eso estás leyendo este artículo ahora.
No más vainilla es una frase que uso con frecuencia en mi marca personal. ¿De qué se trata? Pues, se trata de salirse de lo convencional, de lo que todos esperan… ¿Por qué?
A la mayoría le gusta el helado de vainilla… ¿verdad?
Es bastante común, muchos lo comen y se sienten bien con este sabor…
¿Y si te dijera que el helado de vainilla es como tu zona de confort?
Así como cuando no pruebas un nuevo sabor de helado por miedo a que no te guste, también te cohibes en tu vida diaria por miedo a qué pueda pasar o qué van a decir.
¡Basta! #NoMasVainilla
Debes tener allí contenida una idea maravillosa esperando que le des la oportunidad de materializarse. Y lo que te falta es ese empujoncito.
La historia de tu Marca Personal
Explota la burbuja
Una de las mejores cosas que nos brinda el universo a diario es la diversidad. Así que empieza a mostrarte como eres y sacarle provecho a esos defectos o debilidades que en sintonía con tu propósito pueden darle ese toque diferenciador a tu marca personal o emprendimiento.
Cuando creas tu marca personal, es la historia de tu marca la que le da sentido y propósito. Porque nadie tiene una igual ni puede contarla como tú. Lucha por mantener esa esencia que te hace ser lo que eres.
Encuentra esa característica que hace distinto a tu negocio dentro del mercado, porque no se trata de querer imitar a tu competencia para conquistar el público que ellos tienen, se trata de impulsar tu negocio o emprendimiento en base a su razón de ser y enfocado en ayudar.
Eso es lo que realmente lo hace próspero, cuando te sales de la ecuación y tu vocación por ofrecer un valor y una solución que sume a tu audiencia, pues son ellos realmente los protagonistas de la historia de tu marca.
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Escapa de las expectativas estándar al momento de contar tu historia de marca
Seguro quieres más de lo que algunos podrían decir que eres capaz, en el fondo sabes que puedes más que eso... Entonces, ¡que ya no esté en el fondo! Sácalo e inspírate con esa vibración, no la ignores.
Una marca personal, emprendimiento o negocio que no resalta su factor diferenciador termina en el olvido muy pronto. Tal cual un helado de vainilla que no sorprende a nadie.
Por eso, genera impacto y mueve a tu audiencia provocando emociones en ellos con lo que haces. Así es como el DNA de tu marca será único e irrepetible.
Así que ya es hora de que tengas una visión mucho más amplia desde un punto de vista en el que apliques mercadeo estratégico para organizar tus ideas, puedas sacarle todo el potencial a cada una y comiences a conocer personas que contribuyan a tus objetivos.
¡Anota! Nunca me falla. La inspiración viene de cualquier parte y lo mejor será que te encuentre preparado.
Es súper importante que recuerdes que tu contenido, tu servicio o producto, no es para todo el mundo… ¿Sabes por qué? Porque no es un helado de vainilla.
En cambio, es una parte de ti y a quien no le guste simplemente no es tu cliente ideal o no está alineado con tu propósito. No pierdas tiempo tratando de convencer a todos de que deben seguir tu legado y todo lo que aportas para ayudar a tu audiencia.
Concéntrate en aquellos que sí creen en ti, porque tanto ellos como tú crecen mutuamente gracias a cómo construyes con tu acción inspirada.